El equipo se hunde progresivamente en la Liga, y uno de los capitanes apartados, David Albelda, denuncia al club ante la justicia por entender que no se le permitía desempeñar su trabajo y reclamó una indemnización de 60 millones de euros, la cláusula de rescisión de su contrato. 17 de febrero de 2009, al no poder hacer frente a los pagos de la empresa constructora, pero el equipo protagoniza el mejor inicio de Liga de su historia al permanecer invicto durante las primeras 8 jornadas, colocándose líder.